El último adiós recoge el testimonio epistolar, de tres personajes en las vísperas de su muerte inminente, la del literato Miguel Cervantes, la un militar que a va ser ajusticiado y esscribe a su mujer horas antes de ser fusilado y la de una joven fusilada por el régimen franquista nos adentra a las vivencias de sus protagonistas frente a la muerte.

Este documental forma parte de la serie documental Cartas en el tiempo  que viaja hacia fragmentos de la historia política, social y cultural de nuestro país a través de cartas. Con textos de todo tipo y de épocas muy distintas. Todas estas misivas pueden servir como testimonio de un momento histórico, pero también de testigo sobre la experiencia más vivencial de sus protagonistas.

El útimo adiós inicia con la carta del literato Miguel de Cervantes enviada al Conde de Lernos en 1616, la del militar heroico, Diego de León a su esposa en la España convulsa de 1841 y que posteriormente fue considerado un héroe romántico y última la de Blanca Brisac es de 1939 (5 de agosto) al final de la Guerra  Civil, escrita por una mujer detenida por pertenecer a las Juventudes Unificadas Socialistas y fusilada por el régimen fascista franquista.

Las tres cartas nos transmiten la sensación de intimidad porque revelan las emociones que impulsan la comunicación epistolar: el ánimo, el amor, el dolor y el duelo, la separación, la soledad…

Destacamos la carta de Blanca por su contemporaneidad y por ser ella una de las mujeres fusiladas sin garantía judicial ninguna y sólo por sus ideas. Blanca, encarcelada en las Ventas, es una de las conocidas como Las 13 rosas  (13 mujeres jóvenes fusiladas, llamadas las "menores") y la única que era madre. Su carta es un verdadero testamento espiritual dirigido a su hijo ya que el mismo día fue también fusilaron a su marido al que no dejaron escribir carta por no querer confesarse. Las palabras de Blanca cierran este sincero documental testimonio: "voy a morir con la cabeza alta sólo por ser buena... y que no guardes rencores a los que dieron muerte a tus padres..."

Las tres cartas están escritas en el último instante de la vida, horas antes de la muerte y que los personajes ya conocían, y por tanto nos remite a los sentimientos que afloran en esta circunstancia, sea cual sea como se ha llegado a ella. En las tres cartas escogidas de este documental percibimos el amor que sienten los remitentes hacia sus destinatarios y el reflejo vivo de lo que son como personas y quedó plasmado en un papel. Las cartas nos llevan a personas concretas y circunstancias personales.

La carta de Cervantes, dirigida al Conde Lermos el 19 de abril en 1616 justo en el lecho de su muerte, también es impresionante: "Ayer me dieron la Extrema unción y hoy escribo ésta: el tiempo es breve, las ansias crecen, las esperanzas menguan, y, con todo esto, llevo la vida sobre el deseo que tengo de vivir, y quisiera yo ponerle coto hasta besar los pies a Vuesa Excelencia; que podría ser fuese tanto el contento de ver a Vuesa Excelencia bueno en España, que me volviese a dar la vida. Pero si está decretado que la haya de perder, cúmplase la voluntad de los Cielos, y por lo menos sepa Vuesa Excelencia este mi deseo, y sepa que tuvo en mí un tan aficionado criado de servirle, que quiso pasar aún más allá de la muerte mostrando su intención. Con todo esto, como en profecía me alegro de la llegada de Vuesa Excelencia, regocíjome de verle se dilatadas en la fama de las bondades de Vuesa Excelencia".