La muerte levanta todos los velos. El personaje no puede esconderse más, quitar la máscara y afrontarse sin excusas. Es una ocasión para renacer y esto se propone el autor de No hi ha paraules (No hay palabras).
El catorce de agosto de 2023 será una fecha que quedará grabada, para siempre, en la vida de Francesc Torralba. Es el último día de la vida de su hijo Oriol, quien murió haciendo una excursión por la montaña.
El proceso de duelo es un camino tortuoso y con muchos vaivenes que pone ante lo único insalvable: la muerte. No hay palabras es la obra de un filósofo que tiene que enfrentarse a la realidad.
La muerte de su hijo hiendo de excursión con él, le reta a un replanteamiento desde una perspectiva totalmente nueva de un tema que él ya había tratado cómo era la pérdida.
Todo esto lo hace con una revisión profunda a partir de la experiencia, con un tono solemne y refugiándose en los filósofos y sus escritos.
La muerte de un ser querido nos hace más humildes, más magnánimos y compasivos. Nos confronta a lo esencial, nos pone un espejo delante y nos exige repensar cómo vivimos y para qué vivimos.
La muerte como fuerza vital
El autor asume que frente a esta obra que alguien se preguntará por qué quiso hacerlo: "he dejado pasar tiempo desde el trágico evento y, si bien el tiempo no lo cura todo, sí permite ponerle distancia para que el río de emociones se transforme y cambie de fisonomía.
Asume que "con el transcurso de los meses, la mente se aclara, el corazón se aquieta y el alma respira. Hasta que no he alcanzado esta tranquilidad anímica no me he visto con corazón de ordenar los pensamientos, hacer memoria de él y plasmarlo en palabras."
Y lo remata con "Describir los hechos que viví y los pensamientos y sentimientos que desde el fatídico episodio me han invadido hasta el momento actual es un ejercicio liberador.
Siento que si no pudiera escribir, podría llegar a explotar. Escribir este libro, por tanto, no es ningún lujo; para mí es una necesidad."
Es una lectura compasiva, que transforma por ser desde la vivencia personal de quién ha vivido la tragedia de una pérdida muy querida. No es un texto de consejos ni de autoconocimiento, es un tratado ilustrado de como la muerte se convierte en fuerza vital para el doliente.
Aunque Francesc Torralba es profesor con este texto no pretende dictar ninguna lección, sino compartir el humilde ejemplo de un padre que ha vivido la muerte traumática de su hijo y que intenta expresarla con palabras.
Afrontar el gran tabú
La muerte es el gran tabú de nuestro tiempo. Nuestra sociedad vive de espaldas a ella, como si no nos tuviera que afectar a nosotros sino sólo los demás.
Sin embargo, la muerte irrumpe en medio de la fiesta de la vida para llevarse a los seres que más amamos. Así es y no podemos hacer más. Ocultarla, ocultarla o enmascararla son prácticas del todo estériles porque, tarde o temprano, hace acto de presencia.
El libro se estructura en tres partes: la primera tiene forma de dietario y el autor narra en primera persona y con la máxima fidelidad y transparencia de la que ha sido capaz, el último día de vida de su hijo ya que fue el único testigo de esa jornada.
La segunda parte tiene como título Aprendizajes difíciles. En ella expone algunas de las lecciones aprendidas durante el proceso de duelo que por si son valiosas para personas que experimenten una situación análoga.
La tercera parte tiene como título Palabras del filósofo. En esta recopila un conjunto de máximas de Søren Kierkegaard (1813-1855), al que considera su pensador de referencia y al que considera una fuente de inquietud, pero también de consolación.
Índice del libro
Pròleg
I. El darrer dia del meu fill. Aquell 14 d’agost de 2023
II. Aprenentatges difícils
Experiència i autoritat
Fets i esdeveniments
Les fronteres del llenguatge
La situació-límit
Presència i absència
Relativitat i transcendència
Aferrament, sofriment i amor
De la ira a la resignació infinita
La potència emocional dels símbols
Proximitat i contigüitat
El valor terapèutic del ritual
Afrontament i evasió
El dol, la rialla i la culpa
L’experiència de la gratitud
III. Les paraules del filòsof
La seva mort és una partença silenciosa
La seriositat irromp en l’escenari
Envaït per la tristesa
Anhel d’eternitat
L’antídot a la desesperació
L’eternitat en el temps
La saviesa de la vida
Crida’t a tu mateix: Tu no ets mort!
La mort dona força vital
Cada hora és infinitament preciosa
La mort ens fa a tots iguals
Certesa i incertesa
La mort és un astorador enigma
Viure cada dia com si fos el darrer
Epíleg. Humilitat, compassió, magnanimitat