Hermano Oso
Ambientada en los bosques del noroeste americano, la película narra la historia de Kenai, un joven indio que culpa a un oso de la muerte de su hermano Sitka.
Tras perseguir al animal, Kenai acaba con él, pero entonces su vida sufre un giro inesperado, ya que los Grandes Espíritus lo transforman en un oso, el animal que más odia.
A partir de ese momento, y mientras lucha por recobrar su forma humana, Kenai verá el mundo desde una perspectiva totalmente distinta y aprenderá importantes lecciones sobre la vida.
Kenai, incapaz de comunicarse con Denahi, su otro hermano humano, entablará amistad con un cachorro osuno llamado Koda.
Al mismo tiempo, Denahi, que no sabe que Kenai es ahora un oso, lo perseguirá para cobrarse venganza.
Kenai es todo un reflejo de un adolescente ambicioso, pero con un corazón de oro, o de los entrañables alces que aparecen en la historia.
Cuando los animales incitan a reflexionar sobre la trastienda de la muerte
Con una animación llena de frescura, emoción y humor, Hermano Oso cautiva con una historia inolvidable sobre el coraje, el honor y el descubrimiento de la propia personalidad.
La película también enseña a los niños a procesar la pérdida de un ser querido y a asimilar el sentimiento de culpa.
En su momento fue criticada por motivos religiosos, ya que esta película trata sobre espíritus y cosas no tradicionales del cristianismo.
Lo mejor de Hermano Oso es que no es un film moralista pero transmite un mensaje de amor fraternal, de respeto y empatía, de madurez...
No hay buenos ni malos, sino errores que merecen una segunda oportunidad. Que el amor siempre es mejor que el odio, y que hay que apreciar a las personas que tenemos a nuestro alrededor.
Una película para ver con los más pequeños y profundizar sobre el verdadero sentido de la hermandad, el amor, la amistad, el sacrificio y la igualdad entre nuestros semejantes.
Una obra llena de magia y enseñanza con una banda sonora espectacular de Phil Collins y una animación llena de sensibilidad.