Lucky
Harry Dean Stanton, David Lynch, Ron Livingston, Ed Begley Jr., Tom Skerritt, Beth Grant, James darren, Barry Shabaka Henley, Yvone Huff Lee
La película nos cuenta la historia de un ateo endurecido, un veterano de la Marina de EE. UU que vive en una remota ciudad en el desierto.
Lucky es, ante todo, un hombre de hábitos, así que después de levantarse cada mañana hace sus ejercicios de yoga, se pone una camisa a cuadros, botas y un sombrero de vaquero y se dirige al bar cercano para tomar una taza de café y terminar un crucigrama.
Por la tarde se va a comprar, cigarrillos y leche y vuelve al bar donde se mira programas de televisión y discute hasta bien entrada la noche con los habituales del recinto
Un día Lucky se derrumba repentinamente en su casa y aunque su médico proclama que tiene una salud irrazonablemente buena. "Eres un hijo de puta duro", este admite que incluso a su edad, dejar de fumar probablemente le haría más daño que bien.
La película es una meditación sobre la moralidad, la soledad, la espiritualidad y la conexión humana. Los personajes que se relacionan con él lo hacen a modo de símbolos sobre su vida, cómo cuando una camarera del bar (pasa por su casa para ver cómo está él después de su caída, se fuman un porro y ven una vieja serie de televisión.
El solitario pero amoroso camino de la muerte
Mientras, este de forma inexorable en un accidentado paisaje desértico, camina lenta pero decididamente hacia su próximo destino. Lucky se mueve lentamente, y se dedica a su pasión, los crucigramas que lo absorben a la vez que son la excusa para una reflexiona sobre la naturaleza de la Vida.
En el film hay claramente guiños a la vida real de Stanton, quién con noventa años encarna al personaje y se exhibe en la pantalla con plena presencia. Lucky es una obra maestra que habrá que atesorar para dar una idea diferente al significado de la Vida y la Muerte.
Su personaje está empujado hacia un viaje de auto exploración, una introspección que le conduce hacia lo que a menudo es inalcanzable: la iluminación.
John Carroll Lynch, director de Lucky, nos ofrece a la vez una carta de amor a la vida y un homenaje a la carrera de un actor como Harry Dean Stanton. A los 91 años, este murió por causas naturales el 15 de septiembre 2017, unos días antes del estreno comercial de Lucky en cines (29 de septiembre en Estados Unidos).
Harry Dean Stanton, nació en Kentucky en 1926 y como su personaje, sirvió en la Marina de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial. Estudió en el famoso centro Pasadena Playhouse y tras ello se dedicó durante décadas a trabajar como actor de televisión apareciendo (a veces en varias ocasiones) en series de televisión como Rawhide, Gunsmoke y Bonanza.