Si no despierto
Zoey Deutch, Halston Sage, Logan Miller, Kian Lawley, Jennifer Beals, Diego Boneta, Elena Kampouris, Cynthy Wu, Erica Tremblay, Medalion Rahimi, Liv Hewson,
Si no despierto cuenta la historia de "Sam" Samantha Kingston, una joven de diecisiete años, quien después de morir en un accidente de coche a la vuelta de una fiesta con sus amigas, es obligada a revivir una y otra vez el que será su último día de vida.
Al igual que en el film Atrapado en el tiempo (1993) de Harold Ramis, poco a poco, la joven Sam se da cuenta de que esta experiencia repetitiva continuará hasta que logre solucionar aquello que dejó pendiente.
Esta repetición constante en bucle ocurre cuando Sam parecía tenerlo todo, un novio, popularidad en la escuela y aparente felicidad familiar, tiene que echar un vistazo a su vida.
En definitiva, a cada repetición intenta dilucidar aquello que es importante, pues sólo dispone de unas horas y es consciente de la importancia del recuerdo que los demás tendrán de nosotros.
Vivir el presente con intensidad y conciencia
"Tengo que hacer algo que marque la diferencia... la única salida es cambiar". Tras ser consciente de su déjà vu, Sam, poco a poco descubre que no basta con simplemente hacer las cosas mejor.
A cada repetición en un 12 de febrero, conocido como el Día de Cupido, entre las 06:30h de la mañana y las 00:39 irá recordando lo que le pasó.
Al principio intenta añadir diferencias por si el desenlace cambia. Pero, lo verdadero importante es apreciar aquello que dejamos a los demás en nuestro presente.
La protagonista es consciente de que está viviendo un continuo déjà vu que sus compañeras no perciben. Cómo sucede en otros procesos de toma de conciencia, quién los vive los siente reales mientras los demás lo niegan.
El espectador se convierte así en testimonio de aquello que hacemos en cada momento que debería basarse en la posibilidad de que sea lo último que hagamos aquel día.
Esta reflexión es con la que poco a poco Sam va entrando en cómo dejar lo mejor de ella misma para su ultimo día de vida.
¿Cómo afrontarías que vas a morir?, ¿Que harías diferente?
La trama se basa en un argumento ya visto en otras películas o novelas que incitan a reflexionar: ¿Cómo afrontarías que vas a morir?, ¿Que harías diferente?. El mensaje, a simple vista repetitivo, se dirige hacia la necesidad de la redención.
Cómo película para jóvenes la problemática de fondo se desarrolla en el ambiente de un instituto donde lo que predomina es el bullying y la mala onda, así que se hace predecible el nudo del déjà vu en el que ha caído Sam cada día.
Así que esta película de sobremesa, aunque con muchos estereotipos y personajes más bien planos, es interesante para plantear a adolescentes, el tema de la muerte que les puede parecer muy lejano.
Permite una reflexión sobre las tonterías que una pueda hacer a lo largo del día. Las diferentes opciones que va tomando Sam son sugerentes pensando que pudiera ser el último día. Entonces, la cotidianidad se plantea de otro modo.
Su moraleja es también simple: vive la vida como si no hubiera el mañana, y no olvides aquello que más te importa de verdad. De fondo, y por si el espectador quisiera profundizar, en la clase de filosofía el profesor les explica el mito de Sisifo.