Dios, ¿por qué eres tan idiota?
Sinje Irslinger, Max Hubacher, Til Schweiger, Heike Makatsch, Nuala Bauch, Jürgen Vogel, Jonas Holdenrieder, Benno Fürmann, Jasmin Gerat, Dietmar Bär
Dios, ¿por qué eres tan idiota? es el intento de atrapar lo que la vida te va a quitar en breve. "Como inicias una preciosa historia de amor sabiéndole que deberás ponerle fin dentro de poco. Nuestro principal objetivo debe ser buscar la felicidad y debemos hacerlo ya, inmediatamente, por qué de repente la vida se acaba. La meta es el camino."
Esta es la presentación del tráiler de la película que advierte sobre el hecho que se trata de una ficción inspirada en un caso real. La historia es sencilla pues; Steffi con dieciséis años acaba de graduarse de la escuela secundaria y está ansiosa por viajar a París. Tras este viaje pretende incorporarse en la escuela de policía.
Su destino está perfectamente definido. Sin embargo, el chequeo médico para entrar en la escuela de policial le descubren un cáncer terminal incurable. Su esperanza de vida es inferior a un año. Su madre Eva, la intenta proteger y su padre Frank, un pastor protestante, se le arruinan todas sus creencias.
Frente a este panorama, Steffi toma la decisión de deshacerse de su destino fatal y disfrutar del tiempo que le queda. Para ello emprende el viaje hacia el destino que tenía previsto con un inesperado compañero, Steve que trabaja en un circo.
La pérdida de una hija
La cinta narra en el fondo la escapada de tres días de dos jóvenes. Por supuesto cuando alguien conoce que tiene un final de vida cercano, surge el impulso de vivir a tope.
Esta es la moraleja del argumento, pero la película pone el énfasis también en la visión de los padres que van a perder a una hija. De hecho está inspirada en la historia real de Steffi que murió junto con su familia a los 296 días de haberle diagnosticado el cáncer.
La historia del film es una visión simplificada del libro que escribió su padre. Frank Pape, sobre el final de vida de su hija, titulado Gott, du kannst ein Arsch sein. Stefanies letzte 296 Tage (Heyne, 2020).
Quizás la singularidad de este film, frente a otros de adolescentes que van a morir, es que la protagonista en tres días aprenderá a dejar de planificar para disfrutar del camino que se le ofrece a cada instante. En este sentido, sólo por esta conclusión, es una película muy recomendable para educar a perder el miedo a morir.
Amar hasta el punto que sólo te importa la felicidad del otro
Hay otras películas de adolescentes que van a morir, como Ahora y siempre (2012), o En busca de un sueño (2004), pero también de personas mayores en Ahora o nunca (2007).
Por supuesto, en todas ellas hay deseos que incluso exigen un importante esfuerzo, como le sucede a la protagonista de Bajo la misma estrella (2014), cuando decide viajar a Amsterdam.
Dios, ¿por qué eres tan idiota? se aleja de esta visión de cumplir con un deseo centrándose en saber agradecer a la Vida y amar lo que esta nos brinda a cada instante incondicionalmente. Este es el fondo ideológico que sostiene el metraje y que la convierte en una película educativa.
La realidad del carpe diem, tal como la expresó en su momento el poeta romano Horacio (65 aC-8 dC), en el sentido de aprovechar el tiempo y no malgastarlo, incluso en su esencia no es fácil de comprender. El film da un paso más.
Desde nuestra sociedad consumista, incluso las vivencias deben estar acompañadas de una notable parafernalia. Dios, ¿por qué eres tan idiota? nos muestra una forma diferente de afrontar el diagnóstico de un final de vida.
La película tiene forma de road movie, y se soporta sobre una interpretación llena de realismo, tanto por parte de los jóvenes protagonistas, como de los padres de ella. Una película digna y plagada de buenos mensajes.