The Discovery (El Descubrimiento) nos cuenta cómo en un futuro cercano un afamado científico Thomas Harbor  ha alcanzado, por fin, la certeza necesaria para confirmar que existe otro plano de existencia después de morir.

La noticia no sólo conmociona a la humanidad sino que será la espoleta que arrastre a millones de personas al suicidio para buscar su propio nuevo plano de existencia a través del suicidio.

La trama desarrolla la interacción entre Will, hijo del Dr. Harbor y una enigmática joven que se instala en la mansión de este científico tras salvarla de un intento de suicidio.

The Discovery es un alegato a enmendar nuestros errores en la vida y una glosa al poder del amor para mover el mundo, más allá de las leyes del tiempo y del espacio.

Lo que parecía ser el último descubrimiento no es más que una excusa para abordar también el tema del suicidio aún como tabú y dar argumentos para que quede la duda sobre si la ciencia puede realmente desvelarnos el misterio de la vida ultratumba.

Aunque toda la cinta tiene un discurso fílmico con tintes de investigación, al final esta se resuelve como una certidumbre que no arropa las reflexiones llenas de incertidumbre que van desgranándose a lo largo del metraje.

El tema de la vida después de la muerte siempre ha sido uno de los mayores enigmas de la humanidad y por tanto susceptible de múltiples explicaciones ya sea en el ámbito científico como espiritual. Las creencias religiosas, la fe, la filosofía, incluso la ciencia han intentado dar explicaciones.

Unos dicen que el alma abandona el cuerpo para reunirse con el resto de espíritus que vagan en otro plano de existencia; otros argumentan que la vida es un ciclo inacabable de experiencias en un instante y que denominan reencarnación.

En las últimas décadas la llamada muerte súbita ha permitido obtener el testimonio de muchas personas que han estado en el umbral de algo insospechado. Algunas de las personas que han vuelto tras su "muerte" física por un breve período de tiempo luego han explicado su testimonio.

La película pretende dar su propia visión a estas experiencias cercanas a la muerte. Sin embargo, estamos ante un producto de consumo audiovisual y, por tanto deja entreabierto que pudiera tratarse de una farsa tener experiencias cercanas a la muerte.