El compostaje humano ya es legal en uno de los lands (estados) de la República Alemana, Schleswig-Holstein donde se denomina reerdigung (reentierro) que transforma en 40 días el cadáver del fallecido en una metro cúbico de humus para ser depositado en un cementerio tal como obliga la ley alemana.
Los sitios de enterramiento natural o cementerios verdes, respetan la apariencia natural de la tierra. El futuro de los cementerios habría que imaginarlos reconvertidos en espacios memoriales verdes para el enterramiento natural.
Hoy disponemos de tratamientos post mortem de menor huella de carbono. En algunos países hay autorizados sistemas funerarios más ecológicos, como el entierro verde, el compostaje humano o la biocremación (hidrólisis alcalina). Deberían autorizarse también en España.
El compostaje de difuntos o reducción orgánica natural es una alternativa a la inhumación y la cremación convencional de un cadáver humano. De momento, este tratamiento sólo está legalizado en Estados Unidos, aunque en Europa se demanda baja la denominación de humusación..
Cada difunto, cada cadáver, debería verse como una aportación para dar continuidad a la Vida, una contribución a que la muerte sea fértil, en lugar de un residuo del que desprenderse con la máxima rapidez posible.