De cuerpo presente
De cuerpo presente. Vida, anécdotas, y curiosidades de 13 sepultureros, es un viaje, entre lloros y risas, por la España funeraria, destinado a emocionar a los lectores con historias a pie de tumba. Se dice que ante la muerte todos somos iguales. Sin embargo, algunos viven más cerca de ella a lo largo de su existencia.
La vida de los enterradores, hombres y mujeres de pocas palabras y muchos saberes no siempre están entre los que les agradeceremos sus servicios cuando se inhuma a un ser querido. La mayor parte de ellos son hombres y mujeres que viven con naturalidad y orgullo un oficio duro, pero vivencial ya que la realidad supera muchas veces la ficción más elaborada.
Entre los casos escogidos está el de Fray Tobías, que con 86 años es miembro de los Hermanos Fossores de la Misericordia en Guadix (Granada), una orden religiosa heredera de los antiguos constructores de catacumbas.
Por su parte, otro de los protagonistas es Mariano Benito es el enterrador jefe del Cementerio Jardín de Alcalá de Henares, un lugar pionero e innovador en muchos aspectos ya que uno de los primeros en integrar el tanatorio y los duelos así como la investigación del uso de productos ecológicos en las inhumaciones.
Un sepulturero escritor, Paco Belmonte, otro de los entrevistados es enterrador y escritor, que ejerce en el madrileño cementerio de San Justo. A parte de sacarle brillo a los panteones desarrolla su labor de autor y en su haber lleva varios libros escritos sobre tradiciones fúnebres redactados en las instalaciones del cementerio.
Una mujer, Marisa González Polo, pionera en estas lides, o los miembros de la familia que durante más de medio siglo se ha encargado del cuidado del Cementerio Naval Británico de Rubiáns o Pedro Cruz Solé, un «arqueóogo» discreto, son otros que narran sus historias del más acá, sus variopintas anécdotas a pie de tumba, los favores que les solicitan los familiares de los difuntos o el día a día de sus hijos en los alrededores de los camposantos.
Anécdotas de muerte
La lectura de De cuerpo presente destaca por el sin fin de anécdotas ligadas al rito del enterramiento. Por ejemplo, en Granada un familiar dio un paquete de cigarrillos al sepulturero y este lo abrió para fumarse el pitillo. El familiar advirtió al operario que era para que lo metiera en el ataúd. Este rojo como un tomate obedeció, pero al paquete le faltaba un cigarrillo. La cuestión que plantea el autor es que pensarán los arqueólogos si dentro de décadas se exhuma el cadáver y a la cajetilla le falta un cigarro ya que así es como empiezan las leyendas.
Otro sepulturero, Antonio, narra que su peor momento en un entierro es cuando ya está metido el féretro y los familiares se dan cuenta de que ya no tendrá salida el difunto. En alguna ocasión han intentado evitar que echaran tierra e incluso personas fuera de si les han tirado piedras para que no cerraran la sepultura,
Para Casimiro, el peor trabajo es en un cementerio rural donde las tumbas están directamente en el suelo pero muy juntas y si mientras se cava la nueva tumba uno se desvía le sale la arca del vecino y eso es terrible cuando la familia quiere asistir al cavado de la tumba.
Los objetos encontrados en exhumaciones dentro de los féretros es otro aspecto del anecdotario que cuentan los sepultureros así como las discusiones escuchadas por la herencia una vez el muerto lo acaban de sepultar en el hoyo.
De cuerpo presente es una obra del periodista y fotógrafo Jesús Pozo quién se ha encargado de perfilar el retrato de trece sepultureros españoles ahuyentando los malos augurios supersticiosos que aquejan esta profesión.
Sin duda, la lectura de este libro se puede complementar con el documental La ciudad de los muertos o con la experiencia de la experta funeraria Caitlin Doughty narrada en su libro Hasta las cenizas. Lecciones que aprendí en el crematorio.
Índice del libro
Agradecimientos
Prólogo. Lecciones de vida, por Nieves Concostrina
1. Paco Belmonte. El sepulturero escritor
2. Ramón Rebolo y Emérita Mouriño. Al servicio de Su Majestad británica
3. Emilio Moreno. De paleta al nicho
4. Fray Tobías. El fossor poeta
5. Manuel Aguilar Pérez. Enterrador por oposición
6. José García Salas y Jesús Ibáñez. Entre cenizas y bluetooth
7. Marisa González Polo. Pionera entre tumbas
8. Casimiro Rodríguez Leonardo. El autónomo de los cementerios
9. Pedro Cruz Solé. El arqueólogo discreto
10. Mariano Benito. En el jardín de los columbarios
11. Antonio López. Domicilio, el cementerio
12. Serafín Saavedra. El defensor de la intimidad
Epílogo. Adiós, por Carlos Santos
Glosario