Desde un punto de vista ecológico hay que irse con cuidado con el esparcimiento de cenizas en el mar. Para los denominados sepelios marinos o sepelio náutico se emplean embarcaciones que contaminan el entorno...
Hoy disponemos de tratamientos post mortem de menor huella de carbono. En algunos países hay autorizados sistemas funerarios más ecológicos, como el entierro verde, el compostaje humano o la biocremación (hidrólisis alcalina). Deberían autorizarse también en España.
Los hornos crematorios funerarios son instalaciones que emiten gases tóxicos a la atmósfera. Para que la cremación sea una opción de mínimo impacto sobre el medio ambiente hay que introducir nuevas regulaciones y protocolos de gestión.
Aclaramos que la fuerte carga de nutrientes y energía en la descomposición de todo cadáver impide el crecimiento de la vegetación a su alrededor durante un tiempo. No es recomendable plantar un árbol sobre un cadáver en proceso de descomposición.
La Iglesia católica insiste en que sus filigreses deben evitar la cremación y está prohibido dispersar las cenizas. Sin embargo, aprovechando su poder político presionan al gobierno español para que este obligue depositarlas en cementerios pagando las tasas correspondientes.
Apuntes sencillos sobre los trámites básicos que es necesario realizar ante una defunción. Tras el fallecimiento de una persona es imprescindible realizar una serie de gestiones que la mayoría de las personas desconoce y que es recomendable conocer de antemano.
España no controla las emisiones de los crematorios. En el proceso de cremación estas se podrían reducir mediante el uso de ataúdes de cartón u otros materiales vegetales, però la legislación no lo facilita.
La recuperación de metales estructurales de los féretros como en el interior del cuerpo difunto que salen de la cremación se reciclan por parte de la empresa especializada OrthoMetals los recoge de los crematorios y los recicla.
Un estudio sobre el ciclo de vida de diferentes tecnologías funerarias realizado en Holanda demuestra que hay tratamientos mortuorios más ecológicos que no son legales actualmente.
Esparcir las cenizas en la tierra, el mar o lanzarlas al viento es en nuestro país una práctica habitual. El problema es el abandono de urnas de metal o plástico en el medio natural.
Varias instalaciones de hornos crematorios en el norte de Europa se han adaptado para recuperar el calor a más de 65 ºC para el sistema de calefacción del barrio.cercano haciendo así más ecológico el proceso de cremación.
Esparcir las cenizas mar adentro es un servicio funerario que realizan algunas empresas bajo autorización ya que se consideran un residuo injustificadamente; estas empresas permiten una ceremonia de despedida muy emotiva.
Regresar a la Naturaleza en una nueva vida es el lema de la urna The Trees Remember, un producto funerario que cumple con las más exigentes características para ser considerado interesante para un funeral natural.
La Bios Urn es un receptáculo en el cual las cenizas humanas servirán de abono para dar fertilidad a la tierra en la que se planta la semilla de un árbol.
La cremación directa permite contratar exclusivamente el servicio para el tratamiento del cuerpo difunto lo cual permite saltarse los protocolos establecidos por el servicio funerario convencional y centrarse en la ceremonia.
La Iglesia recomienda insistentemente que los cuerpos de los difuntos y las cenizas procedentes de la cremación sean sepultados en los cementerios u otros lugares sagrados.