Celebraré mi muerte es la recreación teatral de un juicio que no existió sobre el caso del Dr. Marcos Ariel Hourmann. El monólogo de esta obra de teatro-documental transita por las visiones que el protagonista ha vivido de la muerte.
Esta es la historia de Teresa, la joven aranesa cuya muerte impulsó a que todos sus vecinos se unieran para construirle un pequeño cementerio civil en medio del bosque donde pudiera reposar dignamente. Una realidad que merece ser recordada.
La muerte en solitario o sin la presencia de los seres queridos es claramente una mala muerte o una muerte indigna. Esta se ha impuesto con la crisis sanitaria de la Covid-19. Morir en casa es la única garantia para morir en compañía.
Muchas personas llegan al proceso de fin de vida con miedo al sufrimiento, al dolor y al propio proceso de morir, Todavía demasiadas mueren sin el acompañamiento adecuado. Los derechos del final de la vida son imprescindibles en nuestra sociedad